Somos y no somos
desaparecemos todos los días
aparecemos todos los días
a cada átomo
a cada tiempo
a cada muerte
somos y no.
El presente es una ilusión, un hito euclideano.
Ningún segundo puede atraparse,
ninguno,
ahí la fatalidad.
¡Cuánto hubiera querido atrapar la imagen de su espalda!
Alejándose a fundirse en las estrellas.
Algún día volveremos a ser del mismo polvo.
Las dos menos cuarto
y ella no está conmigo.
¿Dónde estarás?
tengo miedo a la inconsciencia,
a veces, con mi almohada,
en mi lengua.
¿Dónde estarás?
En un lugar donde no hay respuesta.